¿Son mejores los juguetes de madera que los de plástico? A simple vista, es evidente que son más beneficiosos para el medio ambiente, pero ¿hasta qué punto tienen un impacto positivo en la vida de nuestro pequeño?  La realidad es que sus beneficios son numerosos, pero muy poco conocidos. Aquí en MamaLuz ofrecemos una gran variedad de juguetes sostenibles, todos ellos basados en importantes corrientes educativas modernas. Y la madera es uno de nuestros elementos estrella.  ¡Sigue leyendo para descubrir por qué y aprender todos los beneficios de los juguetes de madera!

Pese a todo, esto no quiere decir que otros materiales no sean igual de importantes y beneficiosos. Hay que saber en qué situación utilizar los diferentes juguetes que tiene nuestro pequeño. Por ejemplo, un juguete de madera no es la opción ideal para llevar a la bañera, y puede que no sea el material más suave y blando. Es importante variar y explorar diferentes materiales y texturas. Materiales como la tela, el algodón, el papel e incluso algunos plásticos también pueden aportar un gran impacto en el desarrollo de tu pequeño.

 

Beneficios de los juguetes de madera

1- Resistentes y duraderos

La madera es un material muy resistente, bastante más que muchos de los juguetes de plástico de hoy en día, que se rompen tras dos golpes. Un juguete de madera puede durar generaciones y hacer frente a todo tipo de condiciones climatológicas y accidentes.

UN AHORRO DE DINERO

Aunque sean un poco más caros que los juguetes de plástico, son una gran inversión ya que la calidad es mayor. En vez de gastar cientos de euros sin darte cuenta (y contribuir a la mentalidad consumista) en juguetes que se rompen a los dos días, prueba a hacerte con un juguete de madera (¡uno nada más!) y disfrutar de sus beneficios durante años.

DESARROLLA LA EMPATÍA Y LA RESPONSABILIDAD

Ayuda a que tu peque desarrolle su empatía y fomente sus vínculos afectivos. Al crecer con un mismo juguete a su lado, aprende a valorarlo. Desarrolla su sentido de la responsabilidad porque se siente responsable de dicho juguete y siente que tiene que cuidarlo porque es valioso e irremplazable. Por el contrario, si se trata de un juguete de plástico de poca duración, ningún vínculo afectivo se crea, y el niño siente que puede tratarlo como si nada porque puede conseguir otro exactamente igual.

FORTALECE EL VÍNCULO FAMILIAR

Al ser tan duraderos, es común que el juguete se pase de generación en generación. Si tienes algún juguete de cuando eras pequeño y que ahora pertenece a tu hijo, es una forma de conectar con tu pequeño y compartir recuerdos y experiencias. Así mismo, si tu peque tiene algún juguete de madera, en un futuro este puede llegar a ser de sus futuros hijos, sobrinos, etc. También puede ser una manera de fortalecer tu relación con tu hijo y de crear momentos memorables y divertidos juntos.

 

2- Fomentan la imaginación y la creatividad

IMAGINACIÓN

Por regla general, los juguetes de madera vienen menos definidos que los de plástico. En vez de poseer un millón de detalles, son menos específicos. Esto estimula la imaginación de tu peque, que de manera inconsciente o consciente rellena los espacios vacíos con invenciones creativas procedentes de su mente imaginativa.

CREATIVIDAD

Otro beneficio de que los juguetes de madera sean más básicos que los de plástico es que son más manipulables. Tu peque los puede pintar y decorar a su antojo, explotando así toda su creatividad y mejorando sus habilidades artísticas. También convierten su juguete en un objeto único y de valor inigualable.

 

3-Estimulan los sentidos

La madera tiene un olor único, así como un tacto peculiar. Y si está pintada de colores vistosos también fomenta la vista de tu peque. La estimulación sensorial (como hemos visto en diversos artículos) es esencial para el desarrollo del cerebro de tu hijo y para que explote al máximo todas sus capacidades. La estimulación del tacto es la menos conocida. Sin embargo, el uso de juguetes de madera es excepcional para fomentar este sentido. La madera, con su rugosidad y textura irregular,  se convierte en el material perfecto para que tu niño trabaje de manera inconsciente el sentido del tacto.

 

4- Fomentan el desarrollo muscular y la motricidad

Los juguetes de madera son más pesados que los de plástico. Su presencia no pasa desapercibida. Poseen una solidez casi reconfortante. Su peso ayuda  a que tu peque trabaje los músculos del brazo y a que desarrolle sus capacidades motoras.

 

5- Ayudan a conectar con la naturaleza

La madera, un material natural, es excelente para que tu peque conecte con su entorno y aprenda a valorar el planeta y a cuidar de él. Por otra parte, todo niño posee las llamadas expectativas biológicas. Está en su naturaleza el querer entrar en contacto con elementos naturales como la piel de su madre, el calor humano, la arena o la madera. En esta era tecnológica, llena de plástico, móviles y tabletas, es muy fácil desconectar de los elementos más básicos y perderse en el mundo material.

Por último, aunque no por ello menos importante, son mucho más sostenibles y beneficiosos para el medio ambiente. ¿Por qué? Porque están hechos de materiales naturales y porque son mucho más resistentes y duraderos, por lo que su producción es menor. Entonces, si son beneficiosos para tu peque, para ti y para el planeta en el que habitas, ¿a qué estás esperando para hacerte con tu propio juguete de madera?

 

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